Si has llegado hasta aquí, probablemente estás buscando una forma de vender más eficientemente tus productos por Internet, o estás buscando información sobre los códigos EAN. En ambos casos te encuentras en el lugar adecuado, ya que hoy voy a hablarte de la maravilla tecnológica conocida como «códigos EAN», y que va a cambiar radicalmente la forma en que vendes por Internet. ¿Te atreves a descubrirlo? ¡Sigue leyendo!
¿Qué es un código EAN?
Hace algún tiempo yo me hacía la misma pregunta. Probablemente es una palabra que te suene, pero no le das demasiada importancia. En uno de los proyectos empresariales en los que estoy metido con varias personas, una empresa de comercialización en Reino Unido, los códigos EAN se volvieron de una curiosidad a una necesidad. Te cuento por qué en un momento, pero primero vamos a ver qué son exactamente.
Lo cierto es que es muy posible que ya hayas visto un código EAN, sin saber exactamente lo que era. ¿Recuerdas los códigos de barras de los supermercados? Pues esto es un tipo muy especial de código de barras.
Lo que tiene en particular el EAN, con respecto a otros códigos, es que permite identificar un producto en concreto a nivel internacional. Esto permite automatizar muchos procesos, desde la gestión de inventario gratis (ya que no requiere de tener personal apuntando cosas, ni mirando cajas, solamente hacer «blip» con el lector de códigos de barras).
Además, facilita otras cosas, como el envío, manipulación y compra-venta B2B. Visto de esa manera, es también una forma de reducir costes, tanto facilitando y automatizando procesos, como gracias a tener un mayor control de tu mercancía.
¿En qué te afectan los códigos EAN?
Pero si tu empresa es pequeña, o no mueves mucha rotación de productos, quizás pienses que ésto no te afecta. ¡Mejor el papel y boli de toda la vida! ¿No? Casi. Tú quizás no usas los códigos EAN, pero todo el mundo si lo está haciendo. Y me voy a ahorrar evitar hablarte de cómo la competencia reduce costes con esto y tú no, y voy a ir a algo que te afecta mucho más directamente.
Como te comentaba al principio del artículo, yo descubrí esto de los códigos EAN a raíz de esta empresa en Reino Unido de la que tengo un 30% y participo activamente en sus procesos y toma de decisiones. Resulta que cuando fuimos a contratar un almacén de fulfilment, el proveedor nos pedía que los productos trajeran código EAN.
El transportista también quería que los productos tuvieran código EAN, y hasta los proveedores preferían enviar los productos con código EAN. A todos ellos les reduce costes que sea así ¿Qué no tenemos códigos EAN? ¡Pues nos cobraban más del doble! Más nos valía tenerlos entonces ¿No?
Así que no se trata de una decisión personal, o de si te gusta o no el sistema. Se trata de algo que todo el mundo usa, y tú o entras o te quedas fuera. ¿Te imaginas hoy en día no tener teléfono móvil, por ejemplo? Puedes vivir sin él, pero vas a estar fuera de muchas cosas, y cuando se trata de tu negocio, estar fuera de según qué cosas puede ser letal.
¿Cómo implantar los códigos EAN en tu empresa?
Seguramente te estás imaginando una inversión gigantesca en tecnología, y piensas que habrá que formar a tus empleados, que te llevará meses implantarlo, y todo ese tipo de cosas. Afortunadamente te equivocas.
Lo único que tienes que hacer es comprar códigos EAN para cada producto, o variación de producto, y pegárselo. Ya está ¡Tan fácil como pegar pegatinas! El cómo le pegas las pegatinas, o si las coses o lo que sea, ya depende de tu producto, tus procesos… etc, pero ¿A qué no es difícil?
Lo único que tienes que tener en cuenta es que, si los productos tienen variaciones (por ejemplo, una prenda de ropa con distintas tallas), cada variación tienes que identificarla aparte. Entonces la talla M tendrá un código, la L otro… y así. Sin embargo, comprar estos códigos no es muy costoso, si sabes dónde conseguirlos a buen precio.
Por ejemplo, hay webs como https://www.i-ean.com/ donde los tienen a muy buen precio, y puedes conseguir 500 códigos EAN (que ya son códigos…) por tan solo 75€ ¿Cuánto le pagas a tu personal por estar mirando cajas y haciendo inventarios cada cierto tiempo? Probablemente más. Si no te pasas a los códigos EAN es porque no quieres, no porque no puedas.
Y luego está lo que nos pasó a nosotros ¡Todo el mundo nos pedía que los productos tuvieran código EAN! Así que al final, no te va a quedar más remedio que pasarte a este sistema. Ahora ya lo conoces, sabes de qué va la cosa, y puedes implantarlo sin que nadie te cuente historias para venderte complicados procesos. Los EAN son tan fáciles como yo te los he contado, no tienen más ciencia. Puedes empezar a comprar códigos EAN y ponerlos en tus productos hoy mismo.
Espero que hayas encontrado interesante este contenido. Si tienes alguna duda, o quieres aportar algo al tema, no dudes en dejar un comentario. ¡Los leo y respondo todos! Por otro lado, si te ha ayudado este artículo, es posible que sea útil para otras personas de tu entorno ¡Compártelo en tus redes sociales para ayudar a otras personas! Espero que tengas un día estupendo, no dudes en poner códigos EAN en tu vida. ¡Hasta pronto!